San Antonio de Benagéber, un pueblo sin una estructura sólida.
Hay que reconstruir este pueblo desde cero, desde la base. Un pueblo dormitorio, creado a base de urbanizar. Zonas urbanizadas que hoy y con el actual “modelo” de gestión son incapaces de mantener, una vez hundida la burbuja de la construcción, sumado a la falta de previsión nos han llevado a una situación insostenible.
Un pueblo sin cimientos, que ahora y sin los ingresos “fáciles” se tambalea. No se pensó en que un día SAB se poblaría de gente joven, con hijos, con muchas ganas de emprender y de trabajar.
Quien nos gobierna dejó que este pueblo acabara como un hotel, un lugar donde pasar la noche.
Es imprescindible que SAB sea algo más que un hotel, tenemos que crear un tejido comercial, industrial, de ocio que permita que los vecinos de San Antonio no tengan problemas para encontrar un empleo o para iniciar una aventura comercial sin que el fracaso esté casi asegurado.
Tenemos un sector industrial entre la autovía y los campos de los cracks hasta la carretera de Bétera, un lugar inhóspito, totalmente abandonado, más si cabe que el resto del municipio. Nadie que esté pensando en alguna iniciativa verá con buenos ojos este lugar para ello. Un lugar con buenas comunicaciones, buenas conexiones. ¿Por qué no se le ha dado un empuje y se toman medidas para que abra nuevas posibilidades en nuestro municipio?. Sin duda los que gobiernan SAB lo hacen desde demasiados años, quizás han perdido la verdadera percepción de los problemas, viven demasiado tiempo de la política y no perciben la calle con verdadero realismo, se han instalado en el interior de una “burbuja” y no respiran el mismo aire que respiramos los vecinos.
Es imprescindible crear “un pueblo vivo”, las personas gastamos y usamos servicios donde vivimos, nunca lo hacemos mientras dormimos.
Sin duda hay que tomar medidas para cambiar esta situación, no será fácil, seguro, pero se puede!